sábado, 31 de octubre de 2009

Ávila: Datos generales y rutas



Ávila, declarada Patrimonio de la Humanidad en 1985 y desde el 2005 integrada en la Red de Juderías Españolas, ofrece al viajero distintas visitas. Su patrimonio cultural es el reflejo de su historia, de sus arquitecturas, de sus gentes y su paisaje. Un patrimonio que justifica la visita pausada, a distintas horas del día y si es posible con la ayuda de un buen guía que nos ayude a comprender la ciudad antigua, la medieval, la renacentista, incluso la de la recuperación decimonónica.

En Ávila, como en muchas de las ciudades medievales españolas, convivieron judíos, mudéjares y cristianos. Todos ellos dejaron su huella y forman parte de nuestro legado cultural. Para facilitarle su visita hemos diseñado una serie de itinerarios en los que la duración de los mismos dependerá de la clase de viajero que seamos y del tiempo del que dispongamos. Lo que sí sabemos es que cualquiera de estos paseos le hará volver.

Una primera aproximación nos lleva a conocer su historia desde el Museo de Ávila, situado desde 1969 en LA CASA DE LOS DEANES, conocida así porque sus fundadores, Cristóbal y Juan Vázquez de Medina, eran deanes de la catedral. Las colecciones del museo se estructuran en tres secciones: Arqueología, Arte Popular y Bellas Artes. El recorrido por sus salas nos permitirá conocer un palacio del siglo XVI y tener una visión de conjunto de la historia de Ávila, de su pasado vettón, de la romanización, de la presencia de musulmanes y judíos; pero también nos permitirá conocer los usos y costumbres de Ávila y su provincia.

Esta visita quedaría incompleta sin acercarnos a la iglesia románica de SANTO TOMÉ EL VIEJO, hoy convertida en un interesante y único almacén visitable del museo en el que se exponen diversas piezas arqueológicas de distintas etapas históricas.

La romanización de la península llegará también a Ávila. De la presencia de Roma nos ha quedado la toponimia de algunos pueblos de la provincia, las lápidas funerarias e inscripciones epigráficas, aún visitables en el lienzo oriental de la muralla, el trazado de algunas calles que se cruzan en ángulo recto, un puente sobre el Adaja, muy transformado, y la tradición de los primeros mártires de la ciudad: Vicente, Cristeta y Sabina, perseguidos y martirizados por orden del cónsul romano.

Tras la conquista de Toledo en el 1085, Alfonso VI encomendará la repoblación de la ciudad a Raimundo de Borgoña. Durante el siglo XII, asentada ya la población, se irán afianzando los organismos de poder, el Concejo adquiere cada vez más relevancia, la iglesia va fortaleciéndose desde el punto de vista económico, social y espiritual, y a la vez comienza una gran actividad constructiva, levantándose templos, murallas y edificaciones civiles.

Al llegar al siglo XVI la ciudad conoce su máximo esplendor, que se manifiesta tanto en el ámbito civil como en el religioso.

RUTAS

-Arquitectura civil intramuros

Puerta de San Vicente- Casa de Suero del Águila- Casa de Miguel del Águila- Mosén Rubí- Los Paules- Palacio de Diego de Bracamonte- Palacio de Bernardino de Henao- Puerta del Carmen.

La visita que ahora iniciamos transcurre por una de las zonas en las que se conserva un mayor número de palacios, relacionados sobre todo con los Águila y Bracamonte. En todo el trayecto podemos observar cómo las casas fuertes abulenses están estrechamente vinculadas a la muralla; al mismo tiempo advertiremos la evolución de la arquitectura nobiliar abulense.


Entramos por la Puerta de San Vicente y en la calle Lope Núñez a nuestra derecha está la casa de Diego del Águila, vivienda que a lo largo de su historia ha tenido varias reformas, pero donde aún se conservan elementos de la edificación del XVI, reutilizados en reformas posteriores. Frente a ella la Casa de Suero del Águila, construida en lo esencial en el primer tercio del siglo XVI. La severidad que impone el muro de sillería de granito gris de su fachada se suaviza con la ornamentación de su portada y el vano que se dispone sobre ella con minuciosa talla de grutescos. Este edificio será rehabilitado para su uso como sede de la Secretaría de las Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España.

En la misma calle la casa de Miguel de Águila nos muestra otro modelo de portada, que cronológicamente hay que fechar en torno a 1540, de gran sencillez, pero donde se ha perdido ya el gusto por lo medieval.

Este edificio fue inaugurado el 17 de septiembre de 2008 y actualmente es la Sede de la Concejalía de Patrimonio del Ayuntamiento de Ávila, Sede de la Secretaría permanente del Grupo de CPHE y Oficina Unesco de la Junta de Castilla y León.

Muy cerca está la Plaza de Mosén Rubí, configurada por interesantes construcciones, entre las que sobresale uno de los edificios más originales de la arquitectura abulense, el hospital de la Anunciación y la Capilla de Mosén Rubí. Su arquitectura muestra la convivencia del último gótico y el renacimiento. Bajando hacia la puerta del Mariscal dos viviendas salen a nuestro paso, la primera perteneció a los Águila y Bracamonte (hasta 1994 convento de los Padres Paules) actualmente sede de la Junta de Castilla y León, su portada nos permite fecharla a mediados del XVI.

A continuación la de Diego de Bracamonte, el abulense que por orden de Felipe II fue ajusticiado en la plaza del Mercado Chico. Lo más interesante es el patio porticado de amplias proporciones. Desde aquí podemos tomar dos caminos, uno extramuros que nos permitirá ampliar nuestra ruta y llevándonos a dos iglesias, situadas en la zona norte y muy cercanas, que siguiendo los modelos impuestos por el Románico dieron paso a soluciones mudéjares: Santa María de la Cabeza y San Martín. Si prefiere tomar un camino intramuros le sugerimos que siga las calles que de forma desordenada le permitirán descubrir rincones, plazas, arquitecturas que le ofrecerán otra imagen de la ciudad.


-De la Plaza de Nalvillos a la de Santa Ana
Palacio de los Deanes- Santo Tomé el Viejo - Palacio de los Serranos- Santa Catalina- Casa del Conde Orgaz- Casa de Guillamas- Ruinas de San Gil-Casas de Guiomar de Ulloa. Santa Ana.

Iniciamos nuestra visita desde la llamada Casa de Deanes, hoy museo de Ávila. Su fachada formada por dos pisos, en la que se disponen columnas y capiteles zapata se aleja de los modelos característicos de la arquitectura abulense. En sus salas se exponen piezas de arqueología, arte popular y Bellas Artes.

Esta visita nos lleva a conocer el almacén visitable dependiente del museo situado en la iglesia románica de Santo Tomé el Viejo. En la plaza de Italia se levanta el palacio de los Serranos, (actualmente Auditorio y Centro Cultural de la Caja de Ahorros de Ávila) construido a mediados del XVI, su planta se adapta al plano de la ciudad formando esquina con la calle Estrada. Frente a esta casa se conserva la portada renaciente del desaparecido convento de Santa Catalina.

Continuando por la calle de Lesquinas llegamos a la casa del Conde Orgaz (antes Lesquinas) su portada formada por un arco de medio punto con amplio dovelaje y encuadrada con un alfiz corresponde a modelos del primer cuarto del XVI.

En la plaza de los Jerónimos dos interesantes edificaciones: Una casa perteneciente a la familia de los Guillamas que nos muestra otro modelo arquitectónico característico en la ciudad; y la espadaña del viejo monasterio de Jerónimos, una imagen familiar en el paisaje urbano, fue centro de la espiritualidad abulense, primero con la presencia de los jesuitas y a fines del XVI con la de los Jerónimos.

Muy cerca se levanta la casa de Dª Guiomar de Ulloa, amiga y colaboradora de Teresa de Ávila. Nuestra ruta continúa hasta la plaza de Sta. Ana, presidida por el Monasterio de Santa Ana, rehabilitado para sede de la Delegación de la Junta de Castilla y León. Lo más sobresaliente del conjunto es el claustro formado por tres pisos de arquerías y el templo de una sola nave.

No hay comentarios:

Publicar un comentario